Segunda parada de té

Saludos a todas y a todos.

Puesto que el ámbito laboral en el que estoy ubicado actualmente es en el organismo autónomo Confederación Hidrográfica del Júcar, adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, he decidido consultar los datos que la Intervención General de la Administración del Estado publica anualmente mediante un estudio relativo al personal del sector público estatal y que se puede encontrar en la siguiente dirección:

https://www.igae.pap.hacienda.gob.es/sitios/igae/es-ES/Contabilidad/informacionEconomica/Documents/Personal%20al%20servicio%20del%20sector%20p%C3%BAblico%20estatal%202021.pdf.

Dicho estudio perteneciente al año 2021, presenta la plantilla existente en 2 grupos, funcionarios y laborales, y a su vez estos datos se encuentran divididos por sexos.

Los efectivos al servicio de los diversos ministerios de la Administración Civil del Estado son los siguientes:

  • Hombres: 181.607      
  • Mujeres: 66.126      
  • Total: 247.733

Éstos datos porcentualmente representan un 26,7% de mujeres frente a un 73,3% de hombres.

Son unos datos que por si solos, llaman poderosamente la atención por la desigualdad existente en la plantilla de los ministerios.

Si nos centramos un poco más en los efectivos al servicio de la Confederación Hidrográfica del Júcar, podemos encontrar los siguientes datos.

FUNCIONARIOS.

  • Hombres: 145     
  • Mujeres: 111      
  • Total: 256

Ésto representaría un 43,3% de mujeres frente a un 56,7% de hombres, que son datos que evidencian una mayor igualdad.

LABORALES 

  • Hombres: 110      
  • Mujeres: 22      
  • Total: 132

En porcentaje, estaríamos hablando de un exiguo 16,6% de mujeres frente a un 83,4% de hombres.

El personal laboral de la administración  realiza en su gran mayoría trabajos de campo, que en ocasiones conllevan una cierta actividad física en la que es necesario utilizar la fuerza. También se requieren ciertas habilidades con el manejo de herramientas.

En mi opinión, éste es un claro ejemplo de estereotipo, en el que la socialización diferencial de niños y niñas dificulta la entrada en este sector laboral a las mujeres puesto que la información que suelen recibir desde muy pequeñas es que son débiles y no tienen fuerza, y las herramientas son para los hombres, que son fuertes por naturaleza.

Es evidente que la condición física que puede tener cada persona para realizar las tareas en este ámbito laboral en concreto no es en absoluto dependiente del sexo, y por supuesto que nadie nace sabiendo utilizar una herramienta sino que se requiere un aprendizaje que cualquiera puede recibir.

¿Qué estrategias se podrían seguir para acabar con esta desigualdad de género? 

Como punto principal, se podría dotar de mayor diversidad de estímulos a los niños, en particular los que pueden representar un rol en concreto como los juguetes, muñecas/coches, menaje de hogar/herramientas. Y no solo los que pueden tener al alcance en casa, sino también los que pueden visualizar en anuncios de TV, para lo cual es necesario que en dichos anuncios se relacionen tanto niños como niñas jugando entre iguales. De esta forma, ninguno percibirá un rol o un comportamiento que puedan considerar propio de hombres o de mujeres.

Espero que encontréis interesante esta entrada.

Hasta la siguiente!


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